Bernard Arnault financia los Juegos de París en mitad de una crisis y el relevo generacional en LVMH

Este año el conglomerado del lujo francés ha obtenido un 14% menos de beneficios que el año pasado por culpa de la nueva política china de censura hacia la ostentación de la riqueza. Mientras tanto, Bernard Arnault sopesa el retiro.

En el epicentro de la cultura visual, la exhibición y consumo de objetos suntuarios sigue siendo un ritual entre las personas de mayor poder adquisitivo. Conglomerados del lujo como LVMH, Hermès, Kering, Richemont, Chanel o Chow Tai Fook no pierden el foco sobre cuáles son los puntos calientes del planeta para incrementar o potenciar sus ventas.

La inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024 ha desplegado el poder omnipotente de LVMH (Louis Vuitton Moët Hennessy), que ha invertido 150 millones de euros para ser uno de los patrocinadores premium de los JJOO y Paralímpicos. Varias de sus maisons han mostrado su savoir faire, ya que la joyería Chaumet se ha encargado de fabricar las medallas; Louis Vuitton ha elaborado los baúles para la antorcha y las medallas y los estuches para las preseas y ha estado agasajando a los asistentes a diversos eventos con su selecta variedad de champán, vinos, licores y otro tipo de bebidas espirituosas.